"Una semana después de saber que el gerente del hospital Clínico mintió sobre su vacunación, tal y como desveló la SER, José Soto continúa en su puesto y guarda un férreo silencio, no se ha manifestado públicamente desde que estallase el escándalo de la vacunación irregular del hospital que dirige destapado por esta emisora.
El gerente del Clínico calla - no ha atendido las reiteradas peticiones que ha hecho la SER para recabar su versión- a pesar de que él mismo se mostraba como ejemplo de “transparencia y eficiencia, ética profesional, calidad y mejora continua”. Esos valores son los que José Soto ofrece en su carta de presentación como presidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), donde se comprometía a liderar un proyecto “participativo, de Honestidad y la transparencia”.
José Soto incumplió esos principios, no solo se vacunó antes que los 1.000 sanitarios prioritarios de su propio hospital, que a día de hoy siguen sin recibir la primera dosis, sino que, además, mintió sobre su vacunación. “No me he vacunado, yo espero al final", reconoció al equipo de investigación de La Sexta, a quienes llegó a confirmar que él actuaría como los capitanes, siendo el último en abandonar el barco.
Pero la Cadena SER verificó con documentos que el director del Clínico falseó su versión
porque sí se había vacunado. Por tanto, no dijo la verdad. Una actitud
que no solo choca con los valores que defiende al frente de SEDIDA, sino
que, además, colisionan directamente con su papel como miembro del Comité Ético
de esta organización, donde se fija el “el firme compromiso ético
plasmado en el trabajo realizado por este Comité, encargado de la
elaboración de un Código ético propio que mejore y vele por la dimensión
ética de todos los proyectos e iniciativas de la Sociedad, así como de
los directivos y de la gestión sanitaria”. (...)" (Javier Bañuelos, SER, 12/02/21)
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