"Según estas investigaciones, en cuanto
el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, diga “Bárcenas” se
presentarán en su domicilio dos ciudadanos de la provincia china de
Sinkiang, de siete metros de eslora por cuatro de manga, para recoger
cien mil euros en billetes pequeños o bien dejarle un número
indeterminado de luxaciones y fracturas de diversa consideración.
Al parecer, este tipo de apuestas
extremas están siendo bastante frecuentes entre los dirigentes del
Partido Popular, que al ver interrumpidos ahora sus sobresueldos
mensuales, necesitan otras fuentes de ingreso, también en negro, para
mantener sus frenéticos ritmos de vida pero sin tener que contribuir al
fisco, tal como lo hacen los demás ciudadanos de a pie, o de mierda,
como también se conoce a los españoles que pagan a Hacienda un poco más
de lo que les corresponde para compensar lo que se “olvidan” de declarar
las grandes fortunas.
El mismo equipo de investigadores
tendría también indicios de una posible apuesta de González Pons, que se
estaría jugando ciento noventa y cinco mil euros a que no hace una sola
comparecencia pública sin parecer un papanatas, y otra de Dolores de
Cospedal, que estaría apostándose más de trescientos mil euros a que no
se le cae la cara de vergüenza antes de enero de 2016.
La policía sospecha también de una
modalidad de apuesta colectiva en la que el Gobierno, conjuntamente, se
estaría jugando siete millones de euros a que revienta España antes de
que acabe su mandato." (Rokambol news, 18/07/2013)
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