"La contradictoria e incómoda situación
en la que un policía antidisturbios se ve obligado muchas veces a darse
empujones contra su propio escudo, e incluso a utilizar la porra contra
sí mismo mientras se opone a ser desahuciado, también por él mismo y sus
compañeros, dejará de tener lugar a partir del próximo año con la
aprobación de la nueva “ley contra las paradojas policiales”.
El ministro del Interior cree que no es
nada elegante observar a un agente del orden imponiéndose y
zarandeándose a sí mismo, por muchas horas de gimnasio que lleve encima,
y menos aún en su propia casa.
A pesar de que los policías afectados
por sus propios desahucios suelen fallar a propósito los porrazos en su
cabeza, la humillación no deja de ser menor, según palabras del
ministro. “Lo peor es cuando ponen dos voces al mismo tiempo”, ha
señalado Fernández Díaz. “Da miedo y risa a la vez”, añadió.
El último caso de un policía
participando en su propio desahucio ocurrió en Baracaldo hace tan solo
una semana, y terminó causándole varias fracturas y un enorme pesar. Al
parecer, el agente se arrojó contra sí la lavadora-centrifugadora que
les regaló su suegra, y una estantería grande, mientras hacía el papel
de desahuciado y luego se autopropinó una soberana paliza como respuesta
al lanzamiento del electrodoméstico.
El Gobierno, además de la inmediata
aplicación de la ley contra las paradojas policiales, prepara una
disposición anexa para que el impago de la hipoteca por parte de un
policía antidisturbios tenga la misma consideración que la chiquillada
de un joven franquista atentando en una librería llena de gente mayor." (Rokambol news, 27/09/2013)
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