"El síndrome de la esposa
idiota, que tantos respiros judiciales está proporcionando a cónyuges
como Ana Mato, Dolores de Cospedal y la Infanta Cristina, entre otros
personajes públicos, podría ser neutralizado si finalmente los fiscales
dejan de considerar imbéciles a las esposas de los corruptos para verlas
simplemente como delincuentes consortes y aplicarles en tal caso las
correspondientes “condenas gananciales”.
Esperanza Aguirre podría ser
la primera política en compartir no solo un título aristocrático
adquirido por casamiento sino también la mitad de las mamandurrias y
artimañas de su marido, Fernando Ramírez de Haro y Valdés, conde de
Bornos y Grande de España, que recibió más de cuatro millones de euros
de dinero público mientras jugaba en calzoncillos a la Bolsa y ocultaba
parte de sus ganancias a Hacienda para no pagar impuestos y burlarse
así, por partida doble, de los plebeyos.
Según la nueva figura penal
que podría barajar la Fiscalía, la Condesa consorte y Grande de España,
Esperanza Aguirre y Gil de Biedma, pasaría a ser tratada como “La Espe”,
Delincuente consorte y Sinvergüenza de España, con derecho y obligación
a adquirir en la cárcel todos los motes y calificativos que le
correspondan por su título." (Rokambol news, 08/06/16)
No hay comentarios:
Publicar un comentario