"Las multas que el Ayuntamiento de
Barcelona está imponiendo a los bancos que mantienen pisos vacíos
mientras articulan alguna maniobra semi-repugnante que les
permita extraerles el mayor beneficio sin tener en cuenta ni uno solo de
los principios fundamentales de la Ética podría acabar afectando al
menaje de cocina que posee Ada Colau en su piso de la ciudad condal.
“No es venganza sino justicia”, aseguran
las entidades bancarias sancionadas mientras confirman que ya han
puesto a trabajar a sus jóvenes y deleznables abogados psicópatas con el
propósito de conseguir que la alcaldesa de Barcelona les devuelva
absolutamente todas las sartenes antiadherentes que le regalaron desde
junio de 1998. “Esperamos que no estén rayadas” ha declarado el
presidente de ENFIPEHUCO, Entidades Financieras Perjudicadas por la
Humanidad de Colau.
Expertos consultados por esta redacción
creen que la alcaldesa tiene todas las de perder, pues los obsequios que
conceden los bancos a los clientes nunca llegan a pertenecer totalmente
a éstos sino a la puta madre del vicepresidente de cada consejo de
administración.
Al parecer, lo establece una cláusula escrita por un
afamado miniaturista belga en el canto de los impresos de ventanilla.
“En días despejados, con viento del sureste y un buen whisky puede
leerse perfectamente”, ha dicho uno de los vicepresidentes." (Rokambol news, 10/09/2015)
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