"En el Código de la Circulación no existe
referencia alguna al tráfico de escobas en la vía pública y, por lo
tanto, tampoco se constata su prohibición de estacionarlas en el carril
bus, según los abogados prestidigitadores de Esperanza Aguirre y la
opinión de varias amigas suyas con las que suele jugar al mus
habitualmente.
“Siempre se están metiendo con las escobas”, declaró una
de las compañeras de Aguirre refiriéndose a los agentes que multaron a
la expresidenta.
Al parecer, el vehículo con el que
Esperanza Aguirre protagonizó su fuga ante los agentes de movilidad del
Ayuntamiento de Madrid es un artefacto con propulsión de ectoplasma
oxigenado y con una licencia especial del Ministerio de Defensa para
sobrevolar las leyes de la física y las ordenanzas municipales al mismo
tiempo.
Se trata de una máquina muy ligera y muy
nerviosa que requiere una gran desfachatez para conducirla, pues ni
siquiera tiene intermitentes o espejo retrovisor para observar
mínimamente las leyes de la ética y la buena educación.
Puede alcanzar
los ochocientos cincuenta kilómetros por hora y dispone de un sistema
especial para circular entre la mierda sin mancharse en absoluto. “Eso
es por los dos deflectores aristocráticos que lleva incorporados en cada
extremo”, aseguran los ingenieros consultados." (Rokambol news, 30/07/2015)
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