"La espectacular y civilizada nube de
flechas, lanzada ayer domingo desde innumerables puntos de Grecia, cruzó
la cordillera de los Alpes tan solo veinte minutos después, manteniendo
intactas su altura, velocidad y elegancia, para arribar a las 20.35 h. a
los dos glúteos de la cancillera alemana Angela Merkel, donde se
clavaron con una precisión jamás vista antes por sociólogos y expertos
en política económica.
“Parecía absolutamente imposible que más de tres
millones de flechas cupiesen en las posaderas de la primera ministra
alemana”, ha confesado el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem,
quien ha comunicado, además, que casi trescientas mil de esas flechas
han alcanzado la nariz de Jean Claude Juncker, presidente de la Comisión
Europea. “Creo que ahora tendrá problemas para encontrar un par de
gafas que le vayan bien”, ha añadido Dijsselbloem.
También el expresidente español, José
María Rebuznar, ha hecho pública su primera reflexión sobre la acción de
los griegos: “Había apostado ochocientos euros a que la mitad caerían
al mar Adriático”, ha dicho desde el interior de la cámara hiperbárica
de FAES, donde se encuentra intentando compensar su presión arterial con
la del resto del mundo occidental.
Por otro lado, los contramaestres de la
mayoría de los clubs náuticos de Europa achacan el asombroso fenómeno
descubierto esta madrugada en los pantalanes al triunfo del no en el
referéndum griego. Al parecer, la eslora de todos los grandes yates se
ha contraído cinco pulgadas exactas durante la noche. (...)" (Rokambol news, 06/07/2015)
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