"Pese a completar la mejor temporada de la historia, el Gran
Canaria, club de la élite del baloncesto español, ha decidido prescindir
de su entrenador, Pedro Martínez. Evidentemente, no por razones deportivas.
Según publica el blog especializado elcontraataque.es, el equipo canario no ha renovado el contrato del técnico catalán por
razones de índole personal relacionada con las ideas políticas de
Martínez. Este parece simpatizar con algunos argumentos del nuevo y
pujante Podemos, y el dueño del Gran Canaria es el Cabildo, institución
pública en la que manda el Partido Popular.
"Las discrepancias por la continuidad de Pedro Martínez se centran básicamente en dos personas, Lucas Bravo de Laguna, responsables de Deportes del Cabildo de Gran Canaria y Alberto Miranda, el Gerente del Gran Canaria y una de las personas de máxima confianza de Bravo de Laguna", señala la citada página.
"Lucas Bravo de Laguna, como político del Partido Popular, tiene atravesada la ideología de Pedro Martínez a través de Twitter
-prosigue el artículo-. Pronunciarse sobre los desahucios, el aborto y
otros temas más espinosos.
Los tuits y los retuits, por no hablar de los
favoritos tienen más valor que el juego, los resultados y la
satisfacción de la masa social. Ya no se trata de si Pedro Martínez es
un buen entrenador, simplemente es el marginar y erradicar a aquel que
piensa distinto".
"Y se ha llegado a un extremo que Lucas Bravo de Laguna está dispuesto a aumentar la aportación del Cabildo de Gran Canaria
si se renuncia a renovar a Pedro Martínez avisando al club que el
Cabildo reducirá su aportación si se decide aprobar la renovación del
entrenador", añade elcontraataque.
Y, en efecto, el club ha confirmado este martes que no renovará el
contrato de Martínez, que concluye el próximo 30 de junio. Es una
decisión unilateral oficialmente justificada en el deseo de la entidad
de "comenzar un nuevo proyecto deportivo" sin el catalán. (...)" (Vox Populi, 10/06/2014)
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