"Bruselas alerta de un alarmante descenso en el consumo de chorradas.
Sujeta-patatas, batamantas, pequeños extraterrestres de plástico, gafas
con luces, pegatinas de frases tontas, pela-plátanos, zapatillas de
deporte con ruedecitas o la reciente “fabada para beber con L-cassei”.
Todos estos productos y muchos otros están encontrando dificultades para
convencer a los consumidores de su vital necesidad (con la excepción
quizás de la fabada desde que lo anuncia un señor con bata blanca).
“De
continuar en esta línea, nuestra mayor fuente de ingresos podría verse
comprometida”, advierten las instituciones europeas, que ven con
preocupación la caída en picado en el consumo de este tipo de productos.
“Nuestro modelo económico se basa en buena parte en el consumo
compulsivo de estas polleces”. (Picadillo News, 30/01/2012)
No hay comentarios:
Publicar un comentario