"Las listas de espera para matricularse
en este postgrado, que cuesta la friolera de 850.000 euros por cuatro
meses de curso, se extienden ya hasta febrero de 2020, y los sobornos
por conseguir plaza antes de tiempo se están negociando con cantidades
que superan las siete cifras.
“Por supuesto, lo primero que les
decimos a los alumnos el primer día de curso es que no se dejen pillar,
claro que sí, pero también que la cárcel es solo una parte más de toda
la operación”, explica Arsenio Goldman, director del máster.
“Y hay que verla como una inversión, no como un castigo”, añade. “¿A quien no le gustaría pasar dos años en una prisión y encontrarte luego con veintisiete millones de euros para disfrutar como un hijo de puta el resto de tu vida”, volvió a añadir Goldman.
“Y hay que verla como una inversión, no como un castigo”, añade. “¿A quien no le gustaría pasar dos años en una prisión y encontrarte luego con veintisiete millones de euros para disfrutar como un hijo de puta el resto de tu vida”, volvió a añadir Goldman.
Según el director del postgrado, la
lista de cosas maravillosas e inesperadas que un corrupto condenado
puede hacer en la cárcel mientras su dinero duerme en la Islas Caymán
son innumerables, y van desde la sencilla lectura de un libro de poemas
hasta la pintura, la extorsión y las palizas a los demás reclusos o la
estafa a gran escala mediante la venta de cigarrillos y pegamento para
esnifar.
“Aquí les enseñaremos a desarrollar todas esas habilidades”, puntualiza “El Ruso”, uno de los profesores adjuntos del máster.
“Aquí les enseñaremos a desarrollar todas esas habilidades”, puntualiza “El Ruso”, uno de los profesores adjuntos del máster.
Los alumnos reciben también un kit de
adaptación con diverso material básico con el que realizar las prácticas
del máster. Lo más llamativo de los objetos que se entregan a los
estudiantes es un sobrio e incómodo colchón de espuma desde el que
tendrán que acostumbrarse a mantener el contacto con los principales
bancos suizos, sus bufetes de abogados psicópatas o los dirigentes de
sus respectivos partidos. “El máster es caro, ya lo sé, pero es de puta
madre”, recalca Goldman." (Rokambol news, 18/12/2014)
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