‘Hace ya más de 4 años escribí un artículo donde decía que hablar español es de pobres y hacía una lista de los países donde se habla este idioma, y de sus penosas rentas per cápita. En comparación, el muy superior nivel económico de países como Islancia, Noruega o Suecia, donde se hablan lenguas minoritarias como la catalana. Hablar español es de pobres. Fue un artículo muy comentado, sobre todo por los españoles. Artículos, mensajes, insultos, amenazas de toda clase. También la típio, y tan entrañable, tristeza castellana: ¿Cómo puede decir esto de la lengua de Cervantes? Lo llegaron a reproducir en Los Angeles Times. No solo fue ya entonces un artículo del todo cierto sino que resultó ser premonitorio de las cosas mucho peores que tenían todavía que llegar. Hasta el punto de que hoy Brasil es el único país en emergencia de allí abajo, y el único de aquel grupo que no tiene la lengua española como propia. Curioso. Además, organizarán unos Juegos y después de haber derrotado a Madrid. Brutal. Hablar español es de pobres. Y ya que estamos allí, digo también que es de gangsters, con aquella insólita colección de dictadores y mafiosos como Castro, Chávez o Zelaya que todos hablan español: ¿o es que también es casualidad? Me rompe el corazón tener que decirlo pero allí donde se habla español las cosas no funcionan. Y eso que han dado la mejor literatura del mundo. Pero hay un regusto trágico que siempre doblega a las buenas intenciones. En Cataluña, hablar en catalán nos ha salvado. Por eso es tan gracioso cuando un español te habla de riqueza, de progreso y de modernidad. Son la cueva eterna y lo saben. Son el váter de la historia. La independencia es tirar la cadena y marchar. Lávate las manos. Tanto que nos llaman provincianos y la provincia máxima es el sobrero de Mel Zelaya. ¿Y qué habla, Mel? La provincia máxima es la camisa roja de Chávez. ¿Y qué habla, Hugo? La atroz ley abortista de Zapatero. ¿Y qué pía, Pepe? Hablar español es un mal presagio. Solo hay que mirar el mapa y escucharlo. Pobrecitos y devastados. La española cuando besa, es que besa de verdad’." (lavozdebarcelona.com, 21/10/2009)

Pues, vaya... lo que es la vida... el señor Sostres, un mes más tarde... obligado a hablar en la "lengua de los pobres"... por las circunstancias... dinerarias... en fin... sus antiguos aliados nacionalistas lo cuentan así, con gracia enveneda, utilizando sus propias palabras:


"El blogger Salvador Sostres ha debutado en el diario Factual, que dirige Arcadi Espada, con un artículo de opinión sobre la guía Michelin, escrito en la misma lengua que sólo utilizaba para "hablar con la criada", dado que "en Barcelona hace muy hortera hablar español". "Es de pobres y de horteras, de analfabetos y de gente de poco nivel", aseguraba tiempo atrás.

Al ser su colaboración escrita, Sostres todavía se ahorra tener que hacer "este ruido tan espantoso para pronunciar la jota". El ex columnista del Avui también consideraba el español "de gángsteres, con aquella insólita colección de dictadores y mafiosos como Castro, a Chávez o Zelaya que todos hablan español: o es que también es casualidad"?.

Al escribir en su blog en catalán, y en Factual en castellano, Salvador Sostres también pasa a ejercer el bilingüismo, que según sus palabras "quiere decir que te suicides, catalán de mierda". "Los llamados cosmopolitas tendrían que propugnar el bilingüismo regalando rodilleras, porque así cuando nos arrodilláramos para mamarles la polla -que es su único propósito- estaríamos más blanditos: ¿ya que chupamos, que sea con comodidades, no?", consideraba.

El pasado 27 de noviembre, Salvador Sostres, recordaba que "hablar español es de pobres ha resultado ser uno de mis artículos más internacionales. Llegó a ser transcrito, entre exclamaciones, en Los Angeles Times".

"I ahora escribiré en el diario del Arcadi y en español. Como los pobres", asumía." (e-noticíes, 01/12/2009)