“De repente hemos entrado en Anne Summers. Que es una tienda de lencería, en la que tienen lencería erótica, y productos ‘sex-shop’ para mujeres. Directas hemos ido a la zona ‘sex-shop/vibradores’. Yo llevaba un tiempo queriendo comprarme uno, pero siempre pensando en ‘y cómo lo elijo?’ amén de sintiéndome un poco culpable con el asunto. Pero Anna sin ningún tipo de prejuicio me ha dicho que siempre había querido ir y tal, y que ya era hora. Asi es que yo le he dicho que quería comprarme uno. En la tienda en sí, todo mujeres más o menos como yo, pero en inglés, y una pareja.
Todos los vibradores estaban expuestos en una mesa. Todos pueden tocarse y en la mano, sentir como vibran. Desde el ‘clásico’ con forma de polla y sus venas incluidas, a cosas muy sofisticadas con mando a distancia (con y sin cable) y hasta uno llamado I-Ghone. Después de tocarlos todos, he llamado a la dependienta que tendría unos 24 años, muy mona ella, muy pero que muy normal y encantadora. Vamos, que al final, podría incluso haberle dado el abrazo de la amistad.
Ante mi pregunta de ‘qué debo tener en cuenta para elegir un vibrador?’, la respuesta de la dependienta, pues ‘tu llegas al orgasmo clitoridiano o a través de la penetración?’. La idea de responder a algo tan íntimo a alguien completamente desconocido y con Anna a quien conozco desde hace nada, (aunque siento que es el comienzo de una gran amistad), me daba reparo, pero qué podía hacer?.
Pues yo más clitoridiano. Pues entonces ven, mira, este, y este y este. Este tiene 7 velocidades distintas, y este es está siendo bastante popular, porque la intensidad es bastante intensa. Vale, pero cómo puedo percibir si la intensidad es mucha o poca, y me dice, pues mira, lo que puedes hacer, es ponertelo en la punta de la nariz, así sentirás más o menos, lo que pudieras sentir hay abajo.
Así es que Anna y yo con los vibradores en la nariz; yo pensando, este es uno de esos momentos risa que recordaré durante mucho tiempo; entonces digo, creo que este podría ser demasiado. Sí, prueba este, me dice. Así es que después de probar, de que me ofrezca uno por 10 libras que es el boom pero que no es muy bueno para principiantes como yo, me acabo llevando uno por 18 libras.
Me dicen que no puedo lavarlo con agua, pero sí que puedo usar cremas, lubricantes y aceites. Que no necesito usar condones con ello (una tiene que preguntar, por si acaso, una vez leí que en teoría te puedes meter cualquier cosa vegetal siempre que uses un condón con ello). Y que para limpiarlo uso unas toallitas que me han vendido por 5 libras. Así es que tan contenta. Cuando saliamos de la tienda, una pareja con un carrito, entraba en la sección vibradores.” (María looking María, 25-01-08)
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